Por primera vez desde la historia de la democracia una coalición ha sido necesaria para permitir que los socialistas llegasen al poder. No ha sido una colación cualquiera, sino que los comunistas han conseguido convertirse en ministros, un partido de nueva creación se unió a los comunistas para cambiar por completo España. La peor crisis jamás vivida, el coronavirus y los malos números del país, se han unido a cambios estructurales.
Alberto Garzón, el ministro comunista responsable de consumo ha declarado la guerra a los casinos, al juego y a todo un país, que asiste con estupor a sus declaraciones fuera de contexto que han arruinado a más de un sector. Esta es la regulación de bonos que se ha hecho en España en 2021 de manos del ministro de consumo más polémico de la historia.
2021: Así es la regulación de bonos en España con la nueva ley
En 2020 la nueva ley que afectaba a los casinos se paralizó y modificó a causa del coronavirus. Todo el país se vio afectado por una pandemia que colocó a España en las peores cifras posibles. De querer eliminar por completo la publicidad de los casinos se pasó a reducir su presencia.
La publicidad se puede realizar en medios de comunicación de 1 a 5 de la madrugada, impidiendo en ella los anuncios de bono de captación. De esta manera se pretende eliminar la llegada a las páginas online o los casinos de jóvenes o menores. Tampoco se puede añadir a esta publicidad ofertas o bonos en casinos españoles que incentiven el juego. Está prohibido ofrecerlos para de esta manera evitar que una persona se sienta tentada a jugar.
Solo podrán recibir bonos aquellos usuarios que tengan una cuenta verificada durante más de 30 días. Se debe haber podido comprobar sus datos personales para poder actuar en caso de que la persona sufra los efectos más negativos del juego. El estado quiere ejercer un control total de esta actividad, evitando los malos hábitos y de alguna forma tutelando la entrada de cada jugador. A pesar de ser uno de los países con menos ludópatas, el ministerio de Garzón quiere plantar cara a los casinos físicos u online.
Los bonos de bienvenida habrán pasado a la historia, con lo que los nuevos jugadores podrán empezar a jugar con su propio dinero. Hasta pasado unos días no recibirán la correspondiente bonificación o premio a su fidelidad que la mayoría de los casinos ofrecen para agradecer la llegada de nuevos usuarios. Este hecho solo sucederá en España lo que pondrá en una situación diferente a los casinos internacionales.
Los casinos internacionales podrán seguir operando con la misma publicidad que antes, fuera del espacio de trabajo español. Un cambio o una normativa de la que se quedarán fuera. Con este sistema todo el trabajo realizado por las empresas de casinos ha quedado sin efecto y aunque hace más difícil la llegada de nuevos clientes, el sector del casino online sigue viviendo un gran esplendor en toda España.